Hoy, en la era de la financiarización, la cuestión del suelo trata sobre los derivados inmobiliarios que arruinan el medio urbano
Anne Haila
El día 6 la Plataforma de la Zona Norte ha convocado un debate sobre Madrid Puerta Norte (https://clubdebatesurbanos.org/2017/03/31/madrid-puerta-norte_debate/) en el que se debatirá sobre la propuesta del gobierno municipal sobre el ámbito de Chamartín y las peticiones y observaciones de diversos movimientos ciudadanos. No hace mucho decía Álvaro Ardura, del Club de Debates urbanos que la operación Chamartín tenía muchos semblantes, muchas facetas, muchos frentes y conflictos. Algunos de ellos han sido sacados progresivamente a la luz, desde la pavorosa edificabilidad atribuida al ámbito en la propuesta de DCN, a las trampas en el cumplimiento de los estándares o las predicciones no sustentadas sobre efectos de diverso tipo generados por la actuación (empleos, inversión).
Pero ha habido una cuestión que si bien ha sobrevolado desde el principio esta operación y los agentes implicados no ha sido tratada quizás con suficiente atención: el papel de un banco, el BBVA, en la operación.
Tuvo que ser el decano del colegio de Arquitectos de Madrid, José Mª Ezquiaga, dolido al parecer por las “oportunidades” de inversión y empleo supuestamente perdidas por la nueva formulación de la operación Chamartín (acompañando en la queja a la presidenta de la Comunidad Cristina Cifuentes y otro promotores “virtuales” como El País) quien nos recordara este asunto al afirmar en una entrevista: «No se puede hacer nada sin el BBVA».
Es ésta la cuestión sobre la que esta nota quiere incidir: El BBVA ha tenido un papel central en esta operación. Una participación que excede y transforma claramente la función “tradicional” de un banco en el desarrollo urbano, la aportación de crédito a los operadores de una actuación urbanística, de forma que desde el principio el BBVA ha sido no ya garante sino abanderado, incluso mediático, de la misma (lo que dio lugar a la acertada re-denominación del proyecto DCN como “Distrito BBVA”).
¿Qué significado tiene esta especial implicación? Que características y efectos tiene sobre la ciudad este nuevo papel del capital financiero en las operaciones urbanas de la época pos-burbuja? Sigue leyendo →