Ya están disponibles en nuestro canal de Youtube el vídeo del Encuentro-homenaje Lucho-Candeira del pasado 29 de noviembre.
A continuación del vídeo queremos compartir las palabras que Antonio Fernández Alba ha escrito en recuerdo de Luis Miquel Suárez-Inclán y de José Antonio López Candeira. También puedes leer el texto que Antonio Miranda dedicó en memoria de Lucho aquí.
Pliegos por la región del aire
Qué tendrá este acontecer de la partida, partida final, que nos reúne hoy aquí para evocar el recuerdo de dos amigos, compañeros de oficio, los arquitectos Lucho Miquel y José Antonio López Candeira.
Qué acontecimiento interior se confabula en nosotros para recorrer el cauce de tan lejanos recuerdos; junto a un vacío silente que nos revela la época madura de su dilatada vendimia.Espacios y tiempos compartidos en los bordes de la Escuela, edad en fiesta, y siempre abierta a la ingenua utopía de fundar ciudad; en los bordes de la Escuela se encuentra, no la categoría de las cosas, sino los primeros acontecimientos de dar forma a esa inaudita profecía, máxime en un tiempo viciado y dolorido que soportaron con vital presencia nuestros amigos aquí recordados.
Soportaron, sufrimos, años de lacerante mediocridad estabulada, como habitantes de un planeta desconocido para nuestra edad y sobremanera para delinear las esferas de nuestro tiempo. Los amigos Lucho y Candeira, acompañados por los secretos que solo deparan la razón y la emoción en sementera, abrieron los surcos para sembrar la semilla critica desde sus itinerarios personales; la libertad que soporta una moral digna y con tal bagaje acotar el proyecto de un nuevo imaginario de los lugares de la arquitectura, frente aquel binomio que postulaba la retorica imperial o el historicismo folklórico y que cubría de bálagos los eriales maltrechos de nuestra geografía posbélica.
Sin descender a perfiles biográficos, ya celebrados, Lucho y Candeira, creo percibir, constataron como proyecto profesional, que la construcción del espacio de la arquitectura no es el ámbito real o lógico en el que se disponen las cosas, sino el medio, el medio que hace posible la posición de las cosas en el espacio de lo colectivo y, con tan comprometido relato jalonaron los afanes de su oficio junto a una crítica ética, radical y global del acontecer heredado.
Lo hicieron con la emoción, a veces, de un pensamiento fuego que destruye y crea en renovación constante de la materia donde habita el discurso moral y la morada de los otros.
Queridos amigos, que vuestro recuerdo como rumores del viento navegue por las regiones del aire.
Antonio Fernández Alba
Circulo de BBAA
Madrid, noviembre 2016